Cambiando a Puebla: 10 consejos para que empieces hoy
Los estereotipos de distintas sociedades son cómodos refugios para etiquetar el comportamiento de sus pobladores: el regio es codo, el veracruzano pelado, el poblano mamila y así sucesivamente. La realidad puede no distar mucho de algunos casos particulares, pero al ver a cada persona los estereotipos no aplican. Lamentablemente tomamos una cómoda posición y simplemente nos acoplamos al estereotipo sin cambiar nuestro destino.
Hoy Puebla se considera un estado rezagado, cayendo año con año en prácticamente todos los indicadores de competitividad, donde la sociedad tolera pasivamente la corrupción y los malos gobernantes. Así poco a poco vamos “adquiriendo” un nuevo estereotipo muy distinto al de siglos pasados, donde la sociedad poblana era ante todo progresista y lideraba los cambios modernizadores del país.
No hay colectividad sin individuos y el cambio colectivo parte del cambio individual. Ante ello, te propongo hoy “graduarte” con 10 consejos para cambiar en lo particular y colectivamente ir creando un nuevo estereotipo donde la pasividad y la tolerancia a la mediocridad sean cosa del pasado.
1. No creas todo lo que dicen los funcionarios. Ejemplos hay miles y sin embargo nos hemos acostumbrado a la mentira descarada. Contralor mal informado: “El portal de transparencia ha tenido tantos millones de visitas” (matemáticamente imposible por el ranking del portal), secretario de educación: “Mito que en Puebla no haya habido clases por el día del maestro” (yo caminé con niños de la zona de Cuetzalan que no tuvieron clases por dos días en esa semana).
2. Ve los hechos, no los dichos. La prensa se enfoca tanto en “fulano comentó”, “perengano dijo” en lugar de ir a investigar los hechos. Para muestra un botón: los secretarios del medio ambiente de Puebla y Tlaxcala se echan la pelota sobre la tala en la Malinche… que si es en Puebla, que si es en Tlaxcala… Los medios cubren las citas, pero no se asoman a los hechos. Entren a Google Earth y verán las fotos satelitales con las partes pelonas: ¡en Puebla, por supuesto!
3. Compara, mide, evalúa. Una carretera o una avenida relaminada puede costar entre uno y diez millones de pesos por kilómetro. Nuestra vía Atlixcáyotl costará ¡más de 100 millones el kilómetro! (600 millones en 5.3 kilómetros) Los recién inaugurados hospitales de este estado tuvieron los costos unitarios más caros de México, ¿adivina por qué? La comparación con obras en otros estados no deja lugar a dudas: Puebla el cuarto estado más corrupto.
4. Exige velocidad como si fuera tu empresa. Los diputados tardan casi un año en enviar el expediente del comisionado de transparencia para ver si mintió sobre su filiación partidista, tardan años en definir los límites territoriales entre Puebla y Cholula, tardan, tardan, tardan. Y cobran, cobran, cobran. ¿Serán parientes de las tortugas? No lo creo, ellas… si no caminan, no comen.
5. Desaprende: para aprender un buen paso es desaprender… lo malo. Todos hemos hablado del mexicano que cruza la frontera y mágicamente cumple el reglamento de tránsito, no tira la basura en la calle y llega puntual a toda cita. Cambia tu frontera, acércala a tu cama y cada mañana sé un mejor individuo olvidando las malas costumbres, respetándote y respetando a todos los que viven en tu comunidad.
6. Conoce el lugar donde vives: no puedes querer lo que no conoces. ¿Cuántos poblanos no van a las Vegas, a Paris, a Houston, a Cancún y sin embargo no conocen la reserva más importante del mundo en cactáceas, la ciudad antigua más extensa del continente, la zona de grutas más rica en Latinoamérica, el acueducto más largo de México, uno de los dos museos de manantiales en el mundo y cientos de atractivos más, todos ellos en Puebla? (reserva Cuicatlán-Coxcatlán, zona arqueológica de Cantona, grutas en región de Cuetzalan, acueducto cercano a Izúcar de Matamoros, museo de agua mineral en Tehuacán).
7. Habla más allá del café. Todos hablamos en corto del último negocio de fulano con el gobierno, pero pocos tienen el civismo para expresarlo abiertamente en los medios o contribuir con la denuncia formal. Ser un agachado más sólo te condenará a ser un agachado más. Habla, escribe, denuncia, actúa. Tus hijos te mirarán con orgullo y verán tu cabeza erguida en todo lo alto.
8. Pregunta por primera vez y pregunta mucho. Hoy tenemos un derecho como ciudadanos: preguntar al gobierno en qué gastan el dinero. Pide las facturas de publicidad en medios, pregunta cómo se asignaron tales obras, pregunta quiénes fueron los proveedores del mantenimiento al helicóptero que se cayó, pregunta cuál es el gasto en celular y gasolina de tal funcionario, pregunta cuántas camionetas se compraron en tal mes a tal agencia, pregunta sobre los “avances” del gobierno, pregunta sobre los tiempos en el congreso. Pregunta tú y pídele a tus amigos, a tus compañeros de trabajo que pregunten al gobierno (transparencia.puebla.gob.mx) en qué gastan nuestros impuestos y en cómo desquitan su sueldo.
9. Vota y bota. Particularmente alarmante entre los jóvenes el índice de apatía al llegar las elecciones. No perdemos la oportunidad de ir a un cumpleaños, a ver un partido de futbol, a bajar la última rola de Internet… y sin embargo al llegar el día de las elecciones mejor vamos al club a nadar. Todo derecho conlleva una obligación y tu apatía es el mejor alimento del mal gobierno. Si votas, ¡vota bien!... Infórmate y ¡bota a los que no merecen nunca más el poder!
10. Empieza hoy. Lees este artículo, pasas a las siguientes páginas, comentas las fotos y tu distracción se cumplió. Tu estado, el lugar donde vives sigue igual. Sino haces nada y esperas que otro lo haga, seguro el otro esperará lo mismo de ti. Piensa en el futuro de tus hijos y pregúntate si vale la pena seguir “aquí nomás milando”. Escoge tres puntos (te sugiero el 2, 6 y 8) para que calientes motores y ¡empieces hoy!
Saludos Iñaki, muy buenos puntos y comparto tus ideas, también soy profesor, de la Ciudad de México, pero soy de la Mixteca Poblana, de Acatepec, en mi blog tengo fotos de mi tierra, cuando gustes puedes visitarme en http://luisderivermar.wordpress.com
ResponderEliminarUn cordial Saludo
Luis Rivera